Le debo a Bruno una nota, que ya está
escrita y rumbo a Argentina para incorporarse a la revista de
Vinarquía. En esas letras cuento su relación con el vino, hablo de
su forma de verlo, de sus uvas y sus orígenes, pero no describo
ninguno de ellos, a pesar de que la mayoría de los que llevan su
autoría no visten ninguna etiqueta, pero llenan copas de bares y
restaurantes por gran parte de Galicia.
Sin embargo no quiero dejar en blanco
la historia, sin mencionar su primera creación vestida de Ribeira
Sacra. Su nombre es BROA y sus frutos crecen en ambas riberas, las
baña el mismo sol pero las cobijan distintas laderas y las riegan
diferentes ríos, el Sil y el Miño en una sola botella. No eligió
la mejor cosecha para salir a pista con la primera botella que lleva
su firma; pero mira si se tendrá fe el muchacho que eso no le
intimidó para nada.
Mencía en exclusividad, buena madurez
y buenas viñas, bancales de xistos y granitos, cofermentación y algunos
meses en barricas usadas hicieron de este BROA (entre los ríos) un
vino serio, muy serio.
Aún joven, pide aire y botella. Aire
para beberse ahora y botella para seguir creciendo. Sin embargo su
alma no engaña un ápice, se huele la Ribeira Sacra desde el primer
momento. Hierbas frescas, bosque, balsámicos, fresas y tostados
leves, de los que me agradan porque acompañan en silencio. Luego el
aire juega su papel y aparecen mixturas de ciruelas, moras en licor,
mermeladas y especias. Buena capa y color
profundo. De boca poderosa y taninos aún algo rugosos, explota en el
paladar y refresca la boca durante todo su recorrido, dejando un
recuerdo de pura Galicia...
Apunta maneras este chico, ya avisa que
va a ser grande, solo hay que saber esperarlo y mientras tanto,
disfrutarlo.
Siempre digo que solo hay que animarse,
nada más.
Gracias por leernos,
Salutes, Rumbovino.
Difundiendo la cultura del vino y
en favor del consumo moderado y responsable.
¡ Qué arte escribiendo ! leeros hace aún más atractivo disfrutar una buena copa, y junto al resto de artículos de vino gallego (y argentino) hace que me pique aún más la curiosidad por probar esas referencias tan alejadas de las grandes marcas de centro comercial y que tan bien describis. Seguid así.
ResponderEliminarHola amigazo,
Eliminarqué decir a tantas buenas palabras... nos quitas los colores! Ojalá podamos encontrarnos alguna vez y degustar vinos de acá y allá, y que nos lleve la tarde disfrutando.
Un abrazo y salutes!
Ya falta poco para la otra parte de la nota, solo unos días ;)
ResponderEliminarComo ustedes dicen, hay que animarse a más.
Abrazo transoceánico.
Esperamos ansiosos....!!! Abrazo grande y gracias por animarte!
EliminarSalutes