IMPERDIBLE... Vinos de Lujo Rosario

Es muy difícil de imaginar anticipadamente, al menos en forma correcta, lo que uno se va a encontrar en el evento de “Vinos de lujo de Rosario 2010”… imaginamos un ambiente estéril, con gente estirada y vestida de etiqueta… imaginamos un lugar aburrido donde solo tendrían lugar los que “sabían del tema”… imaginamos una frontera infranqueable que era abierta únicamente por dos días para que los de afuera puedan ver algo de lo que hay dentro y les es negado…
Que equivocados estábamos y cuánto nos alegramos… y es que ahora lo que resulta difícil es poder explicar concienzudamente lo que realmente fue la primera edición de vinos de lujo de Rosario 2010… En resumidas cuentas una experiencia (espero que esto no se haga realidad), irrepetible!

El evento duraba dos días y seis horas cada día. Empezaba a las 17 y terminaba a las 23 horas. Así que allá fuimos, el sábado 30 de Octubre a las 17:30 entramos copa en mano (en la recepción te dan la bienvenida y la copa… qué bueno!).

Fue una experiencia maravillosa e inolvidable. La timidez inicial nos pasó enseguida ya que el ambiente era de lo más campechano y acogedor. En cada mesa, las diversas bodegas, ofrecían una selección de sus mejores vinos, acompañados de una atención magnífica.

Fue como descubrir la sala de los tesoros, de pié en la puerta, con los ojos abiertos como platos nos dieron ganas de correr como locos hacia todas y cada una de las mesas… Así que, antes de lanzarnos ante tan espléndida visión, tomamos aire y decidimos ir poco a poco. Y fue lo mejor, ya que hay tiempo para todo, y si no lo hay, lo habrá el próximo año para conocer las que quedaron pendientes. Es que merece la pena parase con calma en cada mesa y probar las diferentes gamas de vino que ofrece cada bodega y comparar… dedicar un rato a interiorizarse sobre la cocina de la bodega y cómo es el hacer de sus productos… los chicos que representan a las bodegas agradecen que uno, además de pedir el vino más caro, pregunte cómo está hecho y quién lo hizo, verá como con esa información el sabor del vino mejora con cada trago. Tampoco podemos dejar de mencionar que tanto las charlas ofrecidas como el espacio gourmet merecen solo elogios.

La organización del evento fue magnífica y los mismos organizadores se molestaban en hacer un seguimiento constante para que todo el mundo se encontrase a gusto. Gracias Fabricio Portelli y gracias Luis Cuello por detenerse con tiempo a charlar con nosotros sin importar quiénes éramos… y muchas más gracias aún por quedarse más tiempo, luego de saberlo. Esas son las pequeñas cosas que hicieron que este evento termine siendo único y, espero que no, irrepetible!