¿Cómo evaluamos los vinos?

Botella vacía

Existen mil formas de valorar un vino… es más, probablemente nos quedemos cortos al arriesgar un número finito para decir esto. De hecho, creemos que existen casi tantas formas como gente que toma vino. 

Hay quienes ponen puntajes (los profesionales podríamos decir?), quienes usan estrellas numeradas del 1 al 5, otros que reemplazan las estrellas por copas o uvas, están aquellos que comparan su RPC, que usan calificativos como bueno, malo, me gustó o no me gustó y podríamos seguir todo día encontrando valoraciones tan personales como efectivas para cada caso… Pero entre todas las personas que calificamos vinos, hay una que usamos todos casi inconscientemente y nunca falla porque es bien pragmática. Veámoslo de esta manera:

Botella 3/4 vacía

Los enólogos y bodegueros diseñan vinos para que gusten y la gente disfrute mientras los bebe (cada día agradecemos la existencia de estos personajes). Y estamos seguros que, para ellos y para todos, no hay mejor señal de que un vino gusta que cuando se acaba rápido la botella!!!! INFALIBLE medida de éxito!!

Los que seguimos el mundo del vino más de cerca, nos diferenciamos del resto de los mortales no porque “sabemos de vino” como suelen pensar ellos; sino que lo que único que nos diferencia realmente es que hemos probado más… y eso te pone en una situación de indiscutible ventaja con el resto.

Investigamos más,  probamos más y, en consecuencia, conocemos más. Por tanto en una fiesta donde hay vinos de todas las gamas y colores, corremos tres cuerpos adelante porque identificamos el o los vinos que están mejor y vamos por ellos. O eso creemos nosotros.

Botella mediada

Ahora…. Nunca les ha pasado que en una reunión de estas, donde presumimos cierta ventaja de este tipo, cuando intentamos ir a por la segunda copa del “vinazo” que identificamos entre otros más ”modestos”, nos encontramos con la cruda realidad de que la botella está VACÍA????

TERRIBLE mazazo!! Cómo puede ser, si el único que conoce este vino soy yo?-nos preguntamos. A la mierda con las ventajas, parece que al final todo el mundo identifica los vinos ricos y se los bebe rápido!! Perdimos por dos cuerpos y aún maldecimos lo lentos que fuimos al no esconder la botella bajo la mesa para que estos que dicen no saber nunca la encuentren.

Por eso, queridos lectores, para nosotros no hay mejor forma de valorar un vino que la palabra cuánto! Sí, sí, CUÁNTO nos tomamos de la botella que abrimos…. Eso es contundente!

Botella 3/4 llena

Así que desde ahora, además de la RPC, las cualidades del propio brebaje y demás yerbas, utilizaremos unas botellitas que nos indican CUÁNTO nos bebimos de ese vino! Así de sencillo y efectivo.

Botella vacía: nos encantó!!

Botella ¾ vacía: nos gustó mucho!

Botella mediada: no está mal, pero con un par de copas me llega.

Botella ¾ llena: más vale busque otra cosa.

Botella llena: no existe vino que no probemos. Así que a esta nunca la vamos a usar!

Salute, RUMBOVINO.