Un blog de vinos por aficionados, para aficionados. Mas que un blog, nuestro cuaderno de notas.



28 abril, 2013

Sabatelius

Pues sí, malacostumbrada a la fácil palabra de Andrés, me he dejado estar, lo reconozco. 
Él tiene esa habilidad que tanto admiro. Me encanta como cuenta las cosas y pienso: Para qué voy yo a decir nada si es eso mismo y, además, lo dice mejor? Así que yo acompaño este blog con lo que creo que hago bastante mejor que es contar con imágenes. Y, pooor supueeeesto, hago de probadora, que también me divierte muchísimo, y disparo mis impresiones al aire mientras el bueno de Andrés se molesta en pescarlas y agregarlas a sus notas.

Pero esta vez, me toca escribir sola, porque acabo de estar en mi tierra y el otro Rumbovino se quedó extrañándome mucho, dice…, en tierra argenta.

Allá estuve a mil, ya que voy por cuestiones de trabajo, pero entre carreras siempre hay un rato para salir con los amigotes y la familia de vinos y tapas. De esto haré un escrito más adelante, y ahora empezaré por el final.

Antes de salir para aquí, de hacer y deshacer maleta una y mil veces porque se me iba de peso, porque nosequé y nosecuánto, pues me harté y el vino que iba a traer para Argentina, me lo destapé para la cena de esa noche…

-“Andresiño, querido -le dije por skype- no te importa, no? Ya lo pruebas tu cuando regresemos”…
-Eeemmmm… psé… claro mujeeer…

Bueno, el caso es que este vino me lo traje de la “Feira de Viños de Chantada” (Provincia de Lugo), que ¡Por cierto!  Si están en Galicia en el mes de marzo tendrán todos los fines de semana alguna feria de vino a qué asistir, y son imperdibles ya que, aunque es invierno y el tiempo no invita mucho a salir de casa, cuando uno llega allá se contagia inmediatamente de la alegría popular, y con unas buenas raciones de pulpo con cachelos y un vinito de la tierra el día se vuelve brillante.

Ribeira Sacra do Miño (Agosto 2012)
Pues allá, una de las bodegas que tenían stand en la muestra era la de Primitivo Lareu. Un escultor  que decidió tomar el testigo y proseguir con los viñedos que tenía su familia en Sabadelle en esta zona de la Ribeira Sacra do Río Miño y creó “Bodegas y Viñedos Lareu”. Aquí probamos alguno de sus vinos y nos gustaron tanto que le compramos alguna botellita para llevar. Primitivo nos contó un poco de su bodega pero había tanta gente que quedó pendiente una visita para la próxima escapada a Galicia.

El Sabatelius de autor, lo probé allá y estaba muy bueno, era un mencía joven pero sin notas estridentes sino intensas y bien estructurado.

Y la botella que, desvergonzadamente abrí en lugar de traerlo, fue el SABATELIUS CARBALLO (Carballo es roble en galego).

Me encantó! Era de estos vinos que no son fáciles de describir porque tanto en nariz como en boca saltaban distintos recuerdos a yerba, frutas rojas pequeñas, y otra serie de descriptores que hacen a la mencía de la Ribeira Sacra inconfundible. Que hay que probarlo, vaya! Son estos vinos muy temperamentales, con mucho carácter pero a la vez delicados, no sé bien cómo describirlos. Creo que, como el paisaje que los cría, están cargados de notas nostálgicas, de verde, de formas sinuosas, de clima frío y lluvioso, de tierra oscura…

Suena esto demasiado abstracto, pero no podría describirlo de otra manera.
La madera no se le notaba apenas, es más, no sé si se la notaba un poco pero por saber que había pasado por ella, ya que la acidez y la fruta y lo intenso del amargor vegetal no la dejaban asomar, quizás servía solo como para contrarrestar un poco las aristas de estos sabores.

El caso es que, descriptores tales o cuales, el vino estaba muy bueno, y se tomaba solito, sin acompañamiento, ya que el regustillo agradable invitaba a seguir tomando más y más. Y esto dice mucho de un vino ¿No?

Pienso que no es casualidad que detrás de este vino esté la mano de un artista y un heredero de esta viticultura ancestral. Creo que esto, sin duda, ya tiene que hacer un vino como mínimo especial…

Ahora nos queda esa visitilla pendiente pero, por si quieren curiosear, aquí les dejo este enlace que descubrimos por casualidad, imperdible  (Primitivo, viticultor)
 
Ribeira Sacra do Miño (Agosto 2012)

Saúde meus amigos!!

Rumbovino

7 comentarios:

  1. ¡Me encanta ese paisaje escarpado de Galicia!

    ResponderEliminar
  2. Hermosa nota Noemí !! dan ganas de probar este vino. Y si el vino pide trago que otra buena crítica se le puede hacer no?
    Salute

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias, Ariel y Fabi! Tenéis mucha razón, hermoso paisaje y sin duda que un traguito pida otro... hace que sea un lindo vinito!! A ver si pronto podemos reunirnos por allá todos para probar estos vinitos da miña fermosa terriña, eh?
    Un abrazo, chicos!

    ResponderEliminar
  4. Qué bueno Noemí! Me encanta lo distinto que escribís!

    Lo de nariz a yerba ¿Es nuestra yerba? Lo sentiste antes?

    Cuántos euros esta?

    Beso!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Adrián! Jejejej! Pues no me refería a la yerba argenta, pero me haces pensar que el amargor que en boca tiene este vino tiene mucho qué ver con ese amargor tan atractivo de la yerba mate en boca... Yo pensaba en hierba de campo, en pasto, en vegetales, pero me has encendido esta bombillita!
      El precio no lo recuerdo bien, estaba entre los 8 y 10 euros...?
      La relación calidad-precio me pareció muy buena.
      Un abrazo!!!

      Eliminar
  5. Gracias por responder mi pregunta y por describir tan bien este vino. Un gran saludo.

    ResponderEliminar

Gracias por comentar.