Existe una gama de precios en el que uno puede llevarse grandísimas sorpresas, sobre todo en el aspecto negativo de la cosa. Para muchos de nosotros, el comprar un vino que se encuentra entre los $60 y $100 significa toda una inversión y una apuesta segura en sí misma. Por tal, nunca esperaría que ese vino termine decepcionándolo. Bueno, es justo esta gama de precios en la que más sorpresas negativas me he llevado. Dentro de este amplio rango, las ofertas son innumerables y en todo este tiempo me ha tocado probar vinos riquísimos y otros que mejor prefiero olvidar. Justamente por ese motivo quiero destacar especialmente este “pequeña flor” de Monteviejo, porque a mí me pareció un vino extraordinario. Hacía rato que queríamos probarlo, y aunque filosóficamente me cueste aceptar el concepto Michel Rolland, debo reconocer que lo que asesora o produce en su Clos de los 7 es digno de destacar, y este vino no es la excepción. Luego podemos discutir si son vinos para la tribuna o no, pero ese debate lo dejamos para otra ocasión.
LINDAFLOR Petite Fleur 2008
Uvas: Principalmente Malbec, Merlot, Syrah y Cabernet Sauvignon
Crianza: 12 meses. 30% barricas nuevas
Alcohol: 14,5º
Precio: $61 / 12 €
La palabra que podría definirlo es que es un vino bien “orquestado”. Donde todos sus componentes se expresan en forma armónica, como si cada uno fuera cediendo su paso al siguiente así cada uno muestra lo suyo. Para nosotros, en todos los sentidos se expresó así.
Tinto complejo, de aromas especiados, fresco y frutal. Muy sugerente y expresivo. En boca, concentrado y de ataque ácido muy agradable, esa acidez de la ciruela por ejemplo, que produce ese hormigueo inicial que se cierra con un dulzor final exquisito. A pesar de su buena estructura, se comportó fluido y ágil. Los taninos, al principio se mostraron un poco duros, pero luego cedieron y quedaron muy bien puestos. Final rico, largo, y dulzón bien…sin empalagar. Muy bien por Peleritti!!
Obviamente es de esos vinos que sin gastar una fortuna (convengamos que tampoco es barato) uno queda bien allá donde lo lleva, o se da un gustazo en casa.
Salute,
RUMBOVINO
Andrés,
ResponderEliminarCoincido con cada una de tus palabras. Para mi tambien fue una gratisima sorpresa el Petite Fleur, no se por que le tenia idea. Y me lo llevé a las vacaciones y resulto el mejor vino que tomé este verano.
Un gran abrazo
Muchas gracias por tu comentario Francisco. Como verás nosotros lo hemos disfrutado especialmente y por eso lo destacamos.
ResponderEliminarUn abrazo grande